Conocer las diferencias entre mezclas asfálticas convencionales y especiales es fundamental para optimizar la durabilidad y el rendimiento de las pavimentaciones.
Las convencionales están compuestas por asfalto y áridos, y se utilizan generalmente en obras de pavimentación estándar debido a su versatilidad y costos más bajos. Estas mezclas son ideales para aplicaciones que no requieren propiedades específicas más allá de la durabilidad y la resistencia al tráfico vehicular.
Por su parte, las mezclas especiales se caracterizan por incluir materiales y procesos que optimizan el rendimiento en condiciones específicas, y se dividen en:
- Microaglomerado en caliente: Al aplicarse en caliente, el microaglomerado proporciona una superficie uniforme y duradera, mejorando la textura y la resistencia al deslizamiento.
- Stone Mastic Asphalt (SMA): Su estructura proporciona una superficie duradera que soporta bien las cargas pesadas.
- Mezclas drenantes: Diseñadas para facilitar el drenaje del agua de lluvia y reducir el riesgo de aquaplaning, presentan una estructura más abierta que permite que el agua fluya a través del pavimento en lugar de acumularse en la superficie.
Cada una de estas mezclas se selecciona y aplica según las condiciones específicas del tráfico, el clima y las necesidades de la infraestructura, ofreciendo soluciones de alto rendimiento y durabilidad frente a desafíos ambientales y de uso intensivo.
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Coordinado por: Ing. Mario Jair.
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